Fecha: 2 de Noviembre de 2008
Las empresas de «capital social» o de «emprendedores sociales» o de «triple balance» (del término triple bottom line, TBL, 3BL o People, Planet, Profit) pueden ser la próxima gran industria en emerger. ¿Qué caracteriza a este tipo de empresas? Simplemente que ganan dinero por hacer el bien.
Este tipo de empresas son organizaciones con ánimo de lucro que trabajan con otras empresas u organizaciones que pueden o no tener ánimo de lucro y que basan gran parte de su trabajo y/o difusión en la utilización de la red (principalmente los donativos a los que están abiertas y la transmisión de experiencias). Existen ya ejemplos de este tipo de empresas sobre todo en Estados Unidos donde ya hay incluso conferencias, pero poco a poco van llegando a Europa. No se dedican a ninguna actividad en concreto, pero como resultado directo o indirecto de su negocio hacen cosas que son beneficiosas para la sociedad y en general este beneficio se obtiene considerando líneas económicas, sociales y ambientales (no solamente la primera), de ahí el nombre de «triple play bottom». Es decir, no sólo es necesario que la empresa vaya bien económicamente, es necesario también que el impacto social y ambiental sea positivo.
Las empresas de capital social basan gran parte de su estrategia en la red, y en la colaboración con empresas sin ánimo de lucro para proporcionar beneficios a sus accionistas. Algunos ejemplos de este tipo de empresas:
- Kiva.- Fue probablemente la primera empresa de capital social y le valió un nóbel a su fundador Muhammad Yunus. La base de funcionamiento de esta empresa es la concesion de microcréditos a pequeñas empresas o emprendedores en países en vías de desarrollo principalmente.
- Zerofootprint.- Una empresa sin ánimo de lucro dedicada al cálculo de emisiones que utiliza una organización con ánimo de lucro que realiza estrategias para ciudades para que reduzcan las emisiones. De manera individual se puede acceder a la web de la empresa y calcular las emisiones de las que somos causantes y obtener consejos de cómo reducirlas de forma gratuita.
- Better World Books.- Esta empresa con ánimo de lucro y sede en San Francisco que obtuvo durante el pasado año unos beneficios por 4,5 millones de dólares, se dedica a la recolección de libros usados, su posterior reventa o distribución gratuita para países en vías de desarrollo.
- D-light.- Fabrica aparatos para proporcionar luz que sustituyen a luces de gasolina o keroseno y que se pueden utilizar en lugares con díficil acceso a la electricidad. La empresa permite donaciones que se utilizan para dotar de equipamiento de este tipo a países en vías de desarrollo a través de organizaciones sin ánimo de lucro.
Las empresas de capital social producen en la actualidad menos beneficios que las tradicionales por regla general, pero hay gente dispuesta a invertir en este tipo de negocios aunque obtengan menos retorno de inversión si ello implica que se hace un bien. Por otra parte, cada vez son más los jóvenes emprendedores que comienzan iniciativas de este tipo con el que pueden ganar dinero y hacer algo de bien como beneficio adicional. Al tratarse de una industria en emergencia, los fallos todavía son grandes y muchas empresas no acaban de arrancar o simplemente no son rentables, caen en nacionalismos o no cumplen el 3BL, pero tal vez sea cuestión de dejar que maduren y se consoliden, de hecho ya hay estados americanos como Minnesota u Oregon que están realizando leyes específicas para tratamiento diferenciado de este tipo de empresas. Al fin y al cabo, es por el bien de todos.