Fecha: 1 de febrero de 2009
Davos, la comuna suiza más grande desde que el 1 de enero de este año se le uniera la comuna de Wiesen, es famosa en el mundo por ser la sede del Fondo Económico Mundial, una fundación que se reúne todos los años en esta localidad suiza en su cumbre anual (tiene otras reuniones por todo el mundo pero la cumbre anual siempre se celebra aquí). Davos se caracteriza porque tradicionalmente ha unido lo más destacado de la política y las finanzas a nivel mundial. La cumbre no tiene la intención de tomar decisiones ni llegar a ningún tipo de acuerdo vinculante para ningún estado ni organización mundial, sino fomentar el debate y los contactos al más alto nivel político y empresarial. Davos ha sido el origen de importantes fusiones empresariales, o del lanzamiento de nuevas tendencias sociales dentro de un ambiente de «mercado de ideas».
La tradición de Davos arranca desde 1971, cuando el profesor suizo Klaus Schwab invitó a los principales ejecutivos europeos a reunirse en la montaña de Davos para debatir aspectos sobre estrategia comercial. El objetivo de este foro es sencillo y complejo a la vez: «Mejorar el estado del mundo», partiendo de la base, como dijo su creador en 1990, que el capitalismo beneficia sólo a unos pocos. En cualquier caso, el punto de vista de Davos es bastante peculiar ya que entiende al capitalismo, no como el problema que obstaculiza el desarrollo de un mundo mejor, sino como parte de la solución para ese desarrollo más beneficioso. Como dijo Ban Ki-Moon, Secretario General de las Naciones Unidas, en 2008: «las empresas se están convirtiendo en parte de la solución, no parte del problema».
La edición de este año (que concluye hoy 1 de febrero) ha sido un poco diferente, ya que se ha tratado de abrir un poco más al mundo, y dejar algo de lado a la exigente elite financiera y ejecutiva que otros años se había paseado por este paraiso suizo. Aunque esa apertura ha sido un tanto relativa y virtual a la vez, ya que no está al alcance de todo el mundo desembolsar los 41.500 euros que cuesta la inscripción (sin duda el congreso más caro del mundo). El FEM en colaboración con YouTube y MySpace organizaron una campaña para seleccionar dos «periodistas ciudadanos» como se ha dado en llamar, para que pudieran asistir al congreso en representación del ciberespacio. La condición era ser seleccionado a partir de un video personal inspirado en los contenidos de la agenda de Davos de este año, que inevitablemente gira en torno a la crisis mundial. Los elegidos (viaje, estancia y asistencia al congreso gratis) fueron Rebecca McQuigg y Pablo Camacho. El primero, un estudiante de arte colombiano de 24 años, explicó en un video por qué es difícil que los ejecutivos que gestionan las empresas se sometan a un código de ética que evite fraudes tipo Madoff. Rebecca, una comunicadora californiana, explicó el poder que tiene la información para implicar a la sociedad.
La edición de este año ha contado con 2.500 asistentes de 96 países entre los que figuran 41 primeros cargos de los países participantes. Por cierto, la presencia de España ha sido, como es tradición, completamente nula y apenas limitada a los presidentes de Iberdorla, Banesto, BBVA y Ferrovial.
Aparte de todo esto, y centrándonos en el debate tecnológico, ha habido puntos importantes que merecen una mención. Se pasó por allí Bill Gates, tal vez el mayor filántropo mundial, y habló sobre los pobres, su situación desesperada ante la incertidumbre de la recuperación económica y la necesidad de que las empresas y particulares que puedan aportar dinero para los más necesitados lo vayan haciendo. Bill Gates ha tenido que «apretarse el cinturón» con la crisis, ya que, según comentó, la Fundación que presiden su esposa y él ha perdido una quinta parte de su valor como consecuencia de la crisis mundial. Gates no ve un problema estructural en la crisis actual, según comentó, ya que explicó que los fundamentos del sistema económico mundial tenían sentido, y que el capitalismo había dado lugar a increíbles oportunidades, aunque pronosticó una profunda crisis de unos cinco años de duración e identificó a la medicina, la genética y, como no, el software, como los grandes motores de la nueva estructura económica mundial.
Chad Hurley, consejero delegado de YouTube (empresa propiedad de Google), habló de YouTube (que recibe 15 horas de video cada minuto) y de la publicidad online. Según Hurley, «El mercado del vídeo en línea está alcanzando la masa crítica. Alguna de estas audiencias son similares en tamaño a las que pueden llegar programas de televisión«, y basó su afirmación en la personalización de la publicidad y en la necesidad que tienen los anunciantes de optimizar el gasto de su dinero. Hurley cuestionó el modelo televisivo para la publicidad por la incertidumbre de la audiencia, y mostró a Internet como alternativa donde el coste es diez veces menor para llegar a la misma audiencia objetivo. La verdad es que estoy bastante de acuerdo con esa afirmación de Hurley. El mercado televisivo es cada vez más complejo e incierto. Los jóvenes consumen mucho más facebook, google o tuenti que cualqueir otra cosa, y los métodos de medición de audiencia televisivos que por ejemplo en nuestro país desarrolla sofres (o TNS como se quiera), están anticuados, son inexactos y están rodeados de un aire de misterio (no es por cuestionarlo, pero ¿alguien conoce a alguna familia, de las teóricas 3.105 que hay, con los famosos aparatitos de medición de audiencia?). Por no hablar de las decenas de canales de televisión que ya existen que dispersan el público objetivo, y de los sistemas para evitar publicidad (zapping y demás aparte), iptv, streaming, etc.
Facebook por su parte, también ha estado en Davos, pero lo ha querido hacer con sus 150 millones de usuarios utilizando encuestas online cuyos resultados se han ido mostrando durante las reuniones que tenían que ver con el tema que se encuestaba. La encuesta no se enviaba a la totalidad de usuarios de facebook, sino a un numeroso grupo elegido al azar. Así por ejemplo,durante al reunión «Paquistán y sus vecinos», Facebook puso en marcha la encuesta «¿Experimentarán Paquistán y sus vecinos mayor inestabilidad durante 2009?» en presencia del primer ministro de Paquistán y otros delegados que después comentaron los resultados. En 3 minutos, el 56% de los encuestados respondieron «Sí», y sólo el 19% respondieron «No» (2.500 participantes en total). Se han planteado otras encuentas como ¿Cuál que crees que es la mayor necesidad para la medicina regenerativa?, Si perdieras la conexión a Internet durante un tiempo muy extenso, ¿habría algún dato de importancia vital que quedaría en ella?, ¿Qué energía renovable es la más prometedora? o ¿Puede la Administración Obama devolver a Estados Unidos a la «buena» senda económica en 2009?.
A destacar también la intervención del Consejero Delegado de Nike, Mark Parker, que afirmó que habían experimentado un aumento dramático de las ventas onlne. Las bases de este crecimiento, según Parker, son la conveniencia y la posibilidad de comparar entre varias tiendas y elegir el producto más adecuado en precio y calidad. La semana pasada Nike anunció un crecimiento global del 9% en sus ventas, aunque no detalló hasta que punto la venta online había influido en este sorprendente aumento en tiempos de crisis.
Aparte de estas menciones, podemos decir que el seguimiento por la red ha sido bastante notable. A continuación algunos ejemplos:
- Twitter ha creado un interesante canal sobre Davos donde se pueden seguir opiniones en tiempo real de participantes (reales o virtuales).
- Netvibes ha diseñado una página de inicio apropiada para el evento.
- Flickr ha puesto en marcha una sección con las fotos más interesantes del evento.
- YouTube ha reservado un canal donde se pueden ver la mayoría de los debates.
- Facebook tiene su propio grupo coordinado desde Davos.
- Frienfeed ha reservado un salón para el evento.
Es posible que estemos asistiendo a un cambio estratégico en las reuniones de este foro, para pasar de un entorno exclusivo y excluyente a otro entorno dinámico y participativo, con una participación universal y con consensos más sociales. Davos avanza hacia la gobernanza, pero el camino es bastante largo, lo de este año no es más que una carta de buenas intenciones, ya que las conclusiones se van a basar en los discursos y debates, y ahí la representación de la gran comunidad virtual mundial ha sido totalmente anecdótica. Pero las intenciones son buenas y adaptadas a los nuevos tiempos. Esperaremos la edición de 2010 para ver los signos de esta evolución.